Ayer estuve en esto. Me lo pasé muy bien, a mi ese ambiente, ese rollo me llama mucho. Pero las cosas como son, desde que llegué pensé que aquello era más una especie de mercadillo medieval a lo punkrock que una muestra de artistas jóvenes. La sensación de ser una reunión de gente que piensa inadaptada que vende sus chucherías a gente rarita que sí se ha adaptado y a la que le va más o menos bien (nosotros) en un local que los reúne para hacer mejor caja ese día (nosotros, qué barbaridad la cantidad de cerveza que me metí en el cuerpo), me impidió ver nada con talento, y seguro, segur
o, seguro que lo había. Capitalismo, ventas. Es como un cáncer, todo lo que toca lo estropea.
No se trata de que los chavales jóvenes pasen un examen sobre la historia del arte, Duchamp y patatín patatán ni tampoco pedir a gente que se curra el espacio que actúe de comisario de la muestra pero, si te crees artista, debes asumir cierto compromiso y buscar un mínimo de profundidad en lo que haces. Está bien ser artesano o diseñador pero... yo que sé.
Qué pasa, que luego cualquier macarra firmó con un spray en las paredes. Y claro, los negocios de alrededor se han quejado y "hay que ver", y "qué gilipollas es la gente", y "ya no nos van a dejar hacer mas" etc. y tienes razón en todo eso. Pero escucha, que si quieres punk pues te puedes encontrar punks. Los punks tienen la costumbre de ser incómodos y bastante gilipollas. Pero insisto, y es la pura verdad, lo pasé muy bien, buen rollo, buen ambiente, buena comida-pechá de cervezas, vamos mas a gusto que un cochino en un charco.