"En efecto (la política) es la que regula qué ciencias son
necesarias en las ciudades y cuáles ha de aprender cada uno y hasta qué
extremo. Vemos, además, que las facultades más estimadas le están
subordinadas, como la estrategia, la economía, la retórica. Y puesto que
la política se sirve de las demás ciencias y prescribe además qué se
debe hacer y qué se debe evitar, el fin de ella incluirá los fines de
las demás ciencias, de modo que constituirá el bien del hombre. Pues
aunque sea el mismo el bien del individuo y el de la ciudad, es evidente
que es mucho más grande y más perfecto alcanzar y salvaguardar el de la
ciudad; porque procurar el bien de una persona es algo deseable, pero
es más hermoso y divino conseguirlo para un pueblo y para ciudades"
Ética Nicomáquea